
La última parada de nuestro viaje institucional por el sur de España nos llevó a Córdoba, ciudad de enorme riqueza cultural y gastronómica, donde el diálogo con los profesionales del sector y las instituciones nos permitió reflexionar sobre retos y oportunidades comunes.
Nos reunimos con el alcalde José María Bellido y la concejala de Turismo, Marian Aguilar, acompañados del presidente de la Academia Andaluza de Gastronomía, José Manuel Gaztelu, de nuestra académica Almudena Villegas y del cocinero Paco Morales. Más tarde, fuimos recibidos por el presidente de la Diputación, Salvador Fuentes.
Uno de los momentos más valiosos fue el encuentro con cocineros, restauradores y representantes del sector hostelero en la Ermita de la Candelaria, donde se abordaron temas clave para el presente y futuro de la gastronomía cordobesa:
- Creer en el propio potencial: Córdoba es rica en Denominaciones de Origen, tiene talento profesional y una cocina tradicional profundamente arraigada, especialmente en sus tabernas.
- Vincular producto y territorio: Los productos con D.O. no solo son garantía de calidad, también son reflejo del paisaje, la historia y la identidad local.
- Potenciar el sentimiento de pertenencia: Hay una necesidad real de que la ciudadanía —especialmente el público joven— se reconecte con su cultura gastronómica, con más orgullo y conciencia de su valor.
- Formación y creatividad: La promoción de productos únicos como los vinos de Montilla requiere formación específica para el personal de sala y una narrativa más creativa que conecte con el cliente. Es preocupante el bajo consumo local de estos vinos y la pérdida de viñedo en la zona.
- Construir un ecosistema gastronómico estable: La administración ha apostado por la gastronomía y esa visión debe consolidarse en una estrategia duradera. Córdoba, única ciudad del mundo con cuatro declaraciones de Patrimonio de la Humanidad, tiene en la cocina un vehículo perfecto para proyectarse al mundo.
Gracias a todos los profesionales que compartieron su visión, su compromiso y su hospitalidad. Desde la Real Academia de Gastronomía seguiremos caminando junto a quienes creen que la gastronomía es, también, cultura, economía y cohesión social.