El mundo del vino está hoy de luto. Una de nuestras más ilustres enólogas, Mª Isabel Mijares, Académica de Número de la Real Academia de Gastronomía, falleció anoche en Madrid.
Maribel fue pionera en un mundo entonces mayoritariamente masculino. Al acabar su licenciatura en Químicas, obtuvo en 1967 una beca del Gobierno Francés para cursar estudios de Enología en el Instituto de Enología de la Universidad de Bordeaux, donde se licenció Enología y Diploma Superior en Degustación de Vinos. En 1970, con una beca de la Fundación Juan March cursó su doctorado en enología en el Instituto de Enología de Bordeaux y obtiene el Diplôme d´Études Approfondies. Fue la primera enóloga en España y la primera mujer en presidir un Consejo Regulador, el de la Denominación de Origen Vino de Valdepeñas.
Desde entonces su trayectoria en el mundo enológico ha sido inmensa. Ha presidido jurados, ferias, foros y salones especializados, ha asesorado proyectos enológicos, publicado libros e impartido conferencias por todo el mundo.
Creó su propia empresa de asesoramiento, Equipo Team y fue Coordinadora y Directora de la Guía Campsa de los Mejores vinos de España (más tarde Guía Repsol), desde 1998 hasta el 2019.
Desde 2017, era Directora Técnica de las Actividades Vitivinícolas del Real Casino de Madrid, donde organizaba tertulias vitivinícolas y jornadas técnicas.
Pero además de este impecable curriculum, Maribel era una de nuestras más ilustres y queridas Académicas. Entró a formar parte de la Real Academia de Gastronomía con un discurso titulado «Mi diálogo con una tinaja de vino, en El Trascacho de Valdepeñas, la noche de San Andrés». Este diálogo constante entre ella, el vino y el mundo fue una de sus mayores virtudes.
En palabras de nuestro presidente, Luis Suárez de Lezo, «la Real Academia de Gastronomía pierde uno de sus grandes referentes, que a lo largo de los años ha contribuido de manera decisiva no solo a la difusión de la cultura enológica de nuestro país, sino al posicionamiento de la propia Academia».
Comunicadora nata y apasionada, su conversación irónica, divertida y llena de entusiasmo será nuestro mejor recuerdo. Descansa en paz, Maribel.