El salón de actos del Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid, sede de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de España, acogió ayer la lectura de un Discurso Académico de D. Rafael Ansón, presidente de la Real Academia de Gastronomía.
Bajo el título “Visión Global de la Gastronomía en el S.XXI”, ha realizado un amplio análisis de la actualidad gastronómica que va mucho más allá del propio disfrute, y que se plantea también en terrenos relacionados con la salud, la cultura, la economía y las relaciones sociales.
El acto comenzó con unas palabras del académico D. Gonzalo Sol, que recordó los 28 discursos leídos desde 1983 por ilustres académicos como José Mª Alfaro, presidente de la primera Academia Española de Gastronomía, Néstor Lujan o Joaquín Calvo Sotelo, y cedió la palabra a Dª Ymelda Moreno, Marquesa de Poza, presidenta de la Cofradía de la Buena Mesa, encargada de presentar al Sr. Ansón. Destacó la vocación gastronómica del Presidente, así como el espíritu e ilusión que ha mantenido intacto desde sus comienzos. También recordó cómo gracias a su trabajo y tesón consiguió la concesión de “Real” para la entonces Academia Española de Gastronomía para terminar destacando su papel fundamental en el reconocimiento mundial de la cocina de nuestro país.
D. Rafael Ansón inaugura los Discursos Académicos que los miembros de la Real Academia de Gastronomía irán realizando a lo largo del año. Ha comenzado felicitando y agradeciendo a instituciones y eventos gastronómicos, periodistas y medios de comunicación, guías y editoriales y a los profesionales de la restauración y la industria alimentaria por su imprescindible papel en la evolución que el sector gastronómico ha experimentado en los últimos años.
Ha destacado cómo “la sociología de la alimentación implica de forma muy especial, que cada vez más personas disfruten comiendo” reclamando que “el placer gastronómico no corresponda solo a unos cuantos privilegiados sino que se extienda a la mayoría de las poblaciones”.
Ha incidido en la importancia de una alimentación sana y adecuada, que no implica la renuncia al placer: “habrá menos obesos cuando todo el mundo descubra la esencia del hecho gastronómico, que es comer saludable y placenteramente”, porque “nunca se puede disfrutar comiendo si no se come de una manera saludable”. Y ha lamentado que los españoles “vivimos mediterráneamente pero no comemos mediterráneamente”.
También ha destacado la relevancia social y cultural de la gastronomía, y la importancia de comer en familia, un valor que se está perdiendo, y con él la educación gastronómica de los niños. Por ello, uno de los principales objetivos de la RAG es incluir en el sistema educativo los conocimientos de alimentación y educación del gusto. Ha recordado que a instancias de la RAG y la FEN, la Comisión de Cultura del Parlamento Europeo aprobó un Informe de Iniciativa sobre el Patrimonio Gastronómico Europeo.
La repercusión económica de la gastronomía ha merecido también su análisis, remarcando que “es la buena mesa española la que anima a casi 8 millones de turistas a visitar nuestro país” y cómo “la gastronomía se ha convertido en uno de los elementos básicos en la imagen positiva de España”.
El Presidente ha defendiendo la tapa ya sea en su versión tradicional como en su transformación en alta cocina en miniatura como la máxima expresión de “la cocina de la libertad” y ha concluido su discurso con un mensaje de esperanza, que es a la vez un deseo: “Que la gastronomía, a la que España ha dedicado tanto tiempo y tanta pasión, contribuya, más aún de lo que lo ha hecho hasta ahora, a generar un mundo mejor”.
La próxima cita tendrá lugar el 9 de abril de 2013 con la lectura de su Discurso por parte de D. Carlos Falcó, Marqués de Griñón.